La Unidad de Litiasis y Endourología del Hospital de Valme atiende a más de 2.000 pacientes anuales

Referente en un abordaje integral: diagnóstico, tratamiento y prevención de los cálculos renalesLa Unidad de Litiasis y Endourología del Hospital de Valme atiende a más de 2.000 pacientes anuales

El Hospital Universitario de Valme de Sevilla atiende cada año a más de 2.000 pacientes con patología vinculada a litiasis renal. Es una patología de gran prevalencia en cuyo abordaje este centro es innovador, tanto en la aplicación de las técnicas más novedosas y mínimamente invasivas, como en el abordaje integral aunando diagnóstico, tratamiento y prevención.

La litiasis renal es una enfermedad causada por la presencia de cálculos o piedras en el interior de los riñones o de las vías urinarias (uréteres, vejiga). Cada año aparecen alrededor de 2.900 nuevos casos por cada 100.000 habitantes. Actualmente, entre el 60 y el 75 por ciento de los cálculos se tratan con este procedimiento que Valme acercó a la población andaluza en la década de los 80. Se trata de la Litoricia Extracorpórea, técnica totalmente ambulatoria y no invasiva que permite localizar los cálculos urinarios mediante rayos x o ultrasonidos (ecografía) y, una vez localizados, los fragmenta utilizando ondas de choque para que puedan ser expulsados fácilmente.

Su Unidad de Litiasis y Endoscopia, perteneciente al servicio de Urología que dirige Pedro Blasco, está dotada de moderno equipamiento y dispone de profesionales altamente cualificados. La conforman los facultativos Carlos Reina como responsable acompañado de la uróloga Carmen Arai Valladares junto a cuatro profesionales de enfermería. Por su parte, el actual equipo de litotricia se renovó en el año 2018 a través de la implementación de la más avanzada tecnología dotada para cirugía urológica endoscópica.

La actividad de esta unidad clínica engloba distintos dispositivos. Al año realizan cerca de 1.000 consultas externas, 800 sesiones de la técnica de litotricia, 150 abordajes quirúrgicos desarrollados en régimen de corta estancia hospitalaria y en torno a 80 cirugías renales complejas materializadas en el quirófano.

Diagnóstico avanzado y profilaxis de la litiasis de repetición

Pero además de la actividad diagnóstico-terapéutica, este centro es referente en el diagnóstico avanzado y la profilaxis de la litiasis de repetición a través de una consulta especializada en estudios metabólicos urinarios. Su objetivo es determinar las causas intermedias que precipitan la formación de cálculos y tratar de manera preventiva a esos pacientes para reducir al máximo la incidencia de nuevas litiasis o el crecimiento de las preexistentes. Para ello, el servicio de Urología se coordina con el Laboratorio de Análisis Clínicos desarrollando una dinámica eficaz y eficiente.

En el ámbito quirúrgico, la Unidad de Litiasis y Endourología del Hospital Universitario de Valme es innovadora en la aplicación de las técnicas quirúrgicas más recientes y novedosas que buscan la menor agresividad y la rápida recuperación para los pacientes. Según Carlos Reina “representan nuevos recursos entre el abanico de opciones terapéuticas para el abordaje de la litiasis renal, adecuándonos a la características patológicas del cálculo urinario y a las indicaciones del estado del paciente”.

En la cirugía mínimamente invasiva para la litiasis, destaca la aplicación en este centro de la `ureteroscopia rígida´ junto a la `nefrolitectomía percutánea´, que sustituyeron en la década de los 90 a la cirugía abierta convencional para tratar las litiasis ureterales y renales, respectivamente. A principios de los 2000 se sumó la `ureteroscopia flexible´, técnica que permite acceder al uréter alto o a las cavidades renales por vía endoscópica retrógrada y tratar in situ los cálculos urinarios. Se trata de una técnica en la que el Hospital Universitario de Valme fue uno de los pioneros en Andalucía.

Estás técnicas están dirigidas a situaciones en las que el volumen o complejidad del cálculo, impide que se resuelva a través de procedimientos menos invasivos como la litotricia. Tanto la ureteroscopia rígida como la flexible aprovechan los conductos naturales para acceder a la vejiga y progresar a través de la luz del uréter hasta el riñón. Su finalidad es localizar, extraer o, más frecuentemente, fragmentar cálculos. Por otro lado, la nefrolitectomía percutánea emplea un abordaje externo mediante una pequeña incisión e introducción de instrumental quirúrgico dentro del riñón para tratar las litiasis de gran tamaño.