La Unidad de Medicina Fetal del Hospital Universitario de Valme, en colaboración con la Sociedad Andaluza de Ginecología y Obstetricia (SAGO), ha organizado una Jornada Andaluza de Medicina Fetal cuya celebración ha congregado a un total de 150 especialistas de toda la comunidad autónoma.
Referente de Andalucía Occidental en dicha patología, este centro sevillano dispone de una amplia experiencia siendo pionero en la implantación del cribado de malformaciones y, actualmente, coordinador del programa andaluz de anomalías congénitas.
Ginecólogos, pediatras, bioquímicos, genetistas y todos aquellos profesionales relacionados con el diagnóstico prenatal han participado en la puesta en común del proceso existente en Andalucía para la detección precoz de malformaciones estructurales y cromosomopatías. Una jornada que ha permitido, además, presentar el programa informático de cribado de anomalías en el embarazo para toda la comunidad.
La Unidad de Medicina Fetal del Hospital Universitario de Valme, perteneciente a la Unidad de Gestión Clínica de Ginecología y Obstetricia que dirige Virginia Caballero, es un dispositivo cuyo carácter multidisciplinar garantiza la calidad de su asistencia. Sus ginecólogos están permanentemente coordinados con los bioquímicos, pediatras y profesionales de Atención Primaria en un trabajo conjunto cuya excelente praxis los sitúan en referencia a nivel regional y nacional en este área.
Detección precoz de malformaciones congénitas
Dirigida por los ginecólogos José Antonio Sainz y Enriqueta Turmo, la Unidad de Medicina Fetal de Valme implantó en el año 2005, de forma pionera, un programa de cribado prenatal en colaboración con el Laboratorio de Análisis Clínicos. Su objetivo fue reducir la tasa de defectos congénitos no detectados antes del nacimiento, beneficiándose hasta el momento más de 30.000 gestantes y permitiendo reducir el 3% de anomalías establecidas estadísticamente al 0,5%. Entre ellas, las anomalías cardíacas y el síndrome de Down son los principales problemas congénitos detectados.
Para llevar a cabo este programa asistencial se realizan dos estudios ecográficos combinados a las 12 y 20 semanas de gestación junto con analíticas. Son pruebas diagnósticas realizadas por profesionales acreditados, que utilizan equipamiento tecnológico de alta resolución. Concretamente, el Hospital Universitario de Valme presenta una tasa de detección de malformaciones fetales mayor al 95% y de cromosomopatías del 93%; lo cual supone una enorme una garantía en este proceso asistencial para las gestantes de este área sanitaria.
A su vez, el cribado posibilita informar a los padres de forma personalizada de los problemas que puedan presentar sus hijos. Además, el centro hospitalario facilita a los progenitores asesoramiento multidisciplinar y acceso a la terapia fetal en aquellos casos que sea necesario, para paliar problemas futuros en los recién nacidos.
Centro referente en formación sobre Medicina Fetal
Gracias a la experiencia acumulada en el Hospital Universitario de Valme sobre este área asistencial, su responsable, José Antonio Sáinz, ha sido nombrado coordinador técnico del PACAC (Programa Andaluz de Cribado de Anomalías Congénitas). Asimismo, el protocolo existente en este centro hospitalario se ha convertido en el modelo que actualmente ha instaurado la Consejería de Salud en todos sus centros con la con la intención de detectar prenatalmente el mayor número de anomalías en todas las gestantes.
Precisamente, la cualificación del personal de la Unidad de Medicina Fetal del Hospital Universitario de Valme le lleva a ser referente nacional en la formación sobre esta especialidad. Periódicamente lleva a cabo numerosos cursos de formación en Ecografía y Doppler Obstétricos para profesionales de otros hospitales.
Por otro lado, la cualificación y buen hacer de sus profesionales también ha generado que la designación como coordinadores de la sección de Medicina Fetal de la Sociedad Andaluza de Ginecología y Obstetricia (SAGO).