La Unidad de Gestión Clínica de Dermatología del Hospital Universitario de Valme dispone en su cartera de serviciosdesde hace tres años de la Terapia de Fotodinámica (TDF), en cuyo período se ha beneficiado más de medio millar de pacientes.

Se trata de una novedosa modalidad terapéutica, eficaz y segura, instaurada por dermatólogos experimentados para el abordaje de lesiones oncológicas cutáneas y otras patologías de la piel.

El cáncer cutáneo se ha convertido en una enfermedad muy frecuente, con una incidencia en continuo aumento a medida que se incrementa la exposición solar y la longevidad de la población. Precisamente, la TDF es una técnica no agresiva, alternativa a la cirugía, que recientemente se ha trasladado a la disciplina de la Dermatología para el tratamiento del cáncer y precáncer cutáneo y de otras patologías cutáneas.

El tratamiento consiste en la aplicación de una crema fotosensibilizante que reacciona ante la luz sobre el tejido afectado, seguido de la emisión en esa zona de una fuente de luz roja. Esta luz activa la fabricación de un tipo de oxígeno que destruye las células enfermas sin alterar las células sanas. Se trata de un procedimiento muy selectivo, ya que la crema sólo es absorbida por las células alteradas o tumorales y la luz roja sólo destruye a dichas células.

Existen múltiples tratamientos para los tumores cutáneos: crioterapia, imiquimod, retinoides, diclofenaco, cirugía, etc. La evidencia clínica ha demostrado una gran eficacia de la TDF, no sólo para eliminar las células tumorales, sino de tratar el campo de cancerización, piel algo alterada alrededor del tumor.

La TDF está especialmente dirigida en aquellas personas que tienen contraindicada la cirugía por diversos criterios, tales como la edad, problemas de corazón o de coagulación de la sangre y en pacientes con múltiples lesiones tumorales, entre otros.

Además de la eficacia y seguridad de esta técnica, no precisar hospitalización ni provocar efectos secundarios; la TDF presenta como principal ventaja su selectividad. Destruye sólo el tumor, sin alterar la piel sana y garantizando excelentes resultados clínicos.